Algún suscriptor cabreado me ha escrito indignado por mi palabrería absurda y barata.
Lo hacían por un correo en el que preguntaba qué harías con tu vida si tuvieras todo el dinero que necesitas.
Si el dinero ya no fuera un problema, ni una necesidad, y estuviera ahí para lo que quisieras.
Unos me dicen que la pregunta es estúpida, que si tuviera todo el dinero del mundo no trabajaría.
Que me tumbaría a beber daikiris en la playa.
Meh, ese plan me atrae menos que nada: no bebo alcohol, no me gusta la playa, no me gusta tomar el sol…
Otros me dicen que soy un vendedor de quinta (ni de segunda, ni de tercera…, de quinta) que ya no sabe qué hacer para rascar ventas.
Otros me contestan como si la respuesta fuera problema mío, como si lla historia no fuera con ellos y me hicieran un favor por contestarme.
Y otros dicen que ningún psicólogo de verdad usaría esa filosofía barata en sus sesiones.
No sé si es que nunca han ido al psicólogo, o es que han ido al colega del barrio que les cobraba 20€ la sesión de charla.
Mi primer psicólogo bien que cobraba ciento y pico por cincuenta minutos de charla…
Solo aceptaba evaluar pacientes por recomendación…
Y de esa evaluación podía perfectamente decirte que no encajabas con él.
Las televisiones le piden que evalúe posibles candidatos, realities de éxito le pedían estudiar si los seleccionados iban a dar juego o soportarían la presión…
Fíjate si ese hombre tenía necesidad de pacientes o dinero.
La psicóloga que tengo ahora no cobra tanto como él, pero elige a sus pacientes con el mismo cuidado.
Si no le encajas, ya puedes pagarle lo que quieras, que no vas a pasar de la recepción.
El caso es que el objetivo de ese ejercicio no era imaginar cómo desperdiciar una vida entera entre alcohol, playas y lujo.
Oye, que si tienes algo personal contra tu hígado…, allá tú.
El objetivo es plantearse qué clase de vida quieres llevar si quitas el dinero de la ecuación.
Si tu meta en la vida es emborracharte y tomar el sol, tú sí que necesitas un buen psicólogo.
El objetivo es que encuentres un término medio entre las 50 horas de un trabajo que no soportas y las 50 horas borracho en una playa paradisiaca.
Porque de todo nos terminamos aburriendo.
Que se lo digan a mi hija, que ha estado enferma esta semana y al tercer día de sofá y tele pedía a gritos hacer cualquier otra cosa.
Y eso que ella NUNCA se iba a cansar de ver la televisión.
Escucha, que esto te va a doler.
Tus problemas interiores no desaparecen cuando tienes dinero.
Solo cambian.
Así que lo mejor que puedes hacer es las paces contigo mismo.
Encontrar una forma de ganar dinero que te satisfaga y apuntar en la dirección a la que realmente quieres ir.
Si en ese plan creas una web y cuentas tu experiencia avanzando en esa dirección, tendrás la mitad del camino hecho.
Por lo demás, cada día envío un consejo por email.
Para gente que quiere llegar a más personas
Cada día envío un consejo contándote cómo conseguir que tu proyecto digital, tu web, tu negocio, llegue más lejos, a más gente y con mejores resultados.
A veces no enseño nada y la gente me escribe diciendo que han aprendido una burrada.
Imagínate los días que sí enseño algo.
Eso sí, el tren no espera. Día que no estás, email que te pierdes.
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